15 de enero de 2024

En el Hospital Vicente Corral Moscoso de Cuenca, establecimiento del Ministerio de Salud Pública (MSP) se realizó por primera vez, y con total éxito, la colación de un cardiodesfibrilador implantable, procedimiento que se realiza en paciente con riesgo de muerte súbita por arritmias ventriculares malignas.

La primera beneficiaria fue Orfa Calle. “Se le colocó un cardiodesfibrilador implantable bicameral. En el último mes había presentado al menos diez episodios de taquicardia ventricular, después de haber sufrido un infarto al corazón tiempo atrás. Lo que hace el dispositivo es reconocer estas arritmias y dar una descarga o choque eléctrico dentro del corazón y evitar la muerte de la paciente”, señaló Javier Pinos, especialista en electrofisiología clínica invasiva.

“Yo vine con un dolor de espalda y pecho que no aguantaba. Le agradezco a Dios, al doctor y a todos los que me han ayudado en la cirugía. Yo me siento feliz de formar parte de la historia del hospital al ser la primera persona en recibir este procedimiento”, dijo Orfa Calle.

Con el procedimiento realizado la paciente podrá reintegrarse a sus labores diarias. La colocación de un cardiodesfibrilador implantable bicameral en una casa de salud privada cuesta entre 20.000 a 25.000 dólares, en el hospital la intervención y gratuita.

Con una inversión de 220.000 dólares, el servicio de electrofisiología está abastecido para este año 2024 con dispositivos de estimulación cardiaca: marcapasos para pacientes con bradicardia (ritmo cardiaco lento), cardiodesfibriladores para pacientes con arritmias malignas, y terapias de estimulación de rama izquierda o estimulación fisiológica (tecnología de punta).

#ElNuevoEcuador